El domingo 20 de mayo nos reunimos en el Santuario de Schoenstatt para celebrar nuestro quinto Rosario Peregrino.
Caminamos juntos en familia, orando y dándole gracias a Nuestra Madre por todas las bendiciones que recibimos de Dios por su intercesión.
Luego asistimos a una Celebración Eucarística que coincidió con Pentecostés, para finalizar este agradable encuentro con un ágape donde aprovechamos para saludar y conversar con nuestros amigos equipistas.
Estemos siempre dispuestos a aceptar el acompañamiento de Nuestra Madre, todos los días de nuestra vida. Que su amor nos guíe para nunca salirnos del camino señalado por su Hijo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario